La idoneidad del procesamiento en el máster junto a precauciones y técnicas relacionadas…
A menudo, muchos productores se preguntan si deberían aplicar plugins de efectos al bus de mezcla. Y es que a veces nos encanta el efecto que aportan ciertos plugins a la mezcla, pero quizá nos preocupe que no dejen mucho margen de maniobra para el posterior proceso de masterización, con la indeseable consecuencia de que eso repercuta en unos másters finales inestables y endebles… ¿Cuál es la mejor decisión en estos casos?
Bueno, dicho de una forma resumida, al final todo depende de que te guste o no el sonido de la mezcla con plugins. Si es así, y esos plugins aportan algo especial al sonido, no vemos ningún problema para que sigas adelante con ellos. Algunos ingenieros ponen reparos al procesamiento de los buses de mezcla, pero la masterización del audio no es una ciencia exacta, así que no hay una forma correcta o incorrecta de hacer las cosas. Sin embargo, conviene que tengas en cuenta algunas consideraciones si te dispones a aplicar plugins sobre el bus principal de tu mezcla.
Precauciones ante el procesamiento global
En general, se recomienda que apliques los plugins cuanto antes, porque es probable que alteren la sensación global de tu mezcla –en algunos casos, para un resultado mucho peor. Por lo tanto, si vas a mezclar con un ecualizador y un compresor sobre el bus (por ejemplo), inserta dichos procesamientos al principio de la mezcla si no quieres llevarte sorpresas desagradables al final del proceso.
Sobre todo, la compresión del bus suele modificar bastante el sonido de una mezcla. Además, recuerda que las señales que tengan los picos más intensos en tu tema, serán las que antes disparen el compresor de bus, lo cual reducirá el nivel global de la mezcla: Así que asegúrate de que ningún elemento «salte demasiado» antes de aplicar ese procesamiento. También conviene que pruebes distintos órdenes de procesamiento –por ejemplo, aplica el compresor antes y después del EQ para comparar las diferencias.
En cualquier caso, procura no comprimir ni limitar en exceso la mezcla, pues le complicarías mucho la vida al ingeniero de mástering. Si le quitas la vida a tus mezclas, será muy complicado devolvérsela más tarde. En este sentido, unos -3dB de compresión/ limitación suponen una buena referencia general, a menos que pretendas crear una mezcla muy comprimida o «bombeada» a propósito.
Muchos productores mezclan con EQ, compresión y limitación dinámica sobre el bus principal con la intención de homogeneizar la mezcla y darle un acabado profesional. Si te gusta el efecto que imponen, deja los ecualizadores y compresores activos, pero te recomendamos que elimines el limitador dinámico antes de enviar tu mezcla al estudio o fase de mástering (intenta ajustar los niveles para que los picos queden comprendidos entre -3 y -10dB).