¿Demasiado familiar y presuntuoso? Parece que Behringer Swing retoma las antiguas técnicas de la marca, copiando en directo modelos de éxito de otros fabricantes…
Además: Arturia se pronuncia oficialmente ante el lanzamiento de Behringer
Más declaraciones oficiales: Frédéric Brun (Arturia CEO) y Axel Hartmann (diseñador)
Opinión: El turno de réplica para Behringer –¿»en serio», tienen algo de razón?
Cuando fabricas tecnología musical, tienes dos opciones: Innovar o copiar (bueno, eso sirve de hecho para todos los ámbitos de la vida). Y parece que esta vez, Behringer Swing sólo hace lo segundo. No tenemos aún sensaciones oficiales desde Arturia, pero todo parece indicar que su ultrapopular KeyStep ha sido replicado en todos sus detalles –diseño, controles y funcionalidades–, menos en el color, que cambia de blanco puro a un negro dudoso y obviamente ‘oscuro’.
Sobre las intenciones de Behringer más allá de ofrecer un pequeño teclado controlador, no vamos a pronunciarnos, ya que caen por su propio peso y los hechos hablan por sí solos. De modo que al final consigues 32 miniteclas con postpulsación, un secuenciador de 64 pasos con ocho notas de polifonía, y cintas de control para tono y modulación. Un modo ‘Chord’ permite disparar acordes de hasta 16 notas desde una sola tecla; y mientras, la prestación de arpegiador pone en juego diferentes modos de reproducción.
KeyStep ha sido replicado en todos sus detalles –diseño, controles y funcionalidades–, menos en el color, que cambia de blanco puro a un negro dudoso y obviamente ‘oscuro’…
Grande en prestaciones, vulgar en concepto: Behringer Swing es ‘genuino cero’
Puedes esperar una copia descarada 1:1 también en el apartado de conectividad respecto de Arturia KeyStep: USB, puertos CV ‘Mod’, ‘Gate’ y ‘Pitch’, E/S para sincro, entrada para pedal de sostenido, y por supuesto, MIDI In / Out.
Con un precio anunciado de 99$, Behringer Swing llega a un mercado colmado por las alabanzas y el respeto de los usuarios hacia KeyStep. Y con éste a un precio oficial de sólo algo de ‘calderilla’ más, nos preguntamos cuánta gente estará dispuesta a pagar por una vulgar copia en lugar de optar por la preferencia genuina –máxime cuando muchas tiendas anuncian KeyStep a un precio similar de calle.
Quien desee invertir bien su dinero, también puede valorar la existencia de Arturia KeyStep 37, como versión más grande y mejorada; y en la cúspide de prestaciones, KeyStep Pro, al que hemos dedicado incluso esta sesión en vídeo. Ya lo ves, todo está dicho: Uno se dedica a mejorar su propio concepto, llevándolo a cotas máximas de expansión, evolución y funcionalidades; y mientras, otro copia el pez original, pretendiendo de paso hacer el día cuando el pescado ya fue vendido hace lustros. Pobre concepto, triste imagen.