Josep María Castells, DJ pionero y productor de música dance, ha fallecido, dejando un vacío irreparable en la industria y en los corazones de aquellos que le conocimos y admiramos…
La noticia del fallecimiento de Josep María Castells Lloberas, a sus 59 años, ha golpeado a la comunidad de la música electrónica. Con una carrera que abarcó más de cuatro décadas, Castells se convirtió en una de las figuras más influyentes del panorama musical, no sólo en España, sino en toda Europa.
A lo largo de su carrera, revolucionó el concepto de DJ, transformándose en un artista que no sólo mezclaba y pinchaba música, sino que creaba experiencias únicas para sus seguidores. Y suya fue en buena parte la proeza en la creación y el desarrollo del fenómeno megamix, compartida con otros grandes como Mike Platinas, Toni Peret, y Quique Tejada –con el permiso de muchos más.
A caballo entre las máquinas open reel y el sampling primigenio
Con una trayectoria destacada en sellos (Max, Vale Music), clubes y emisoras de radio, Josep María Castells fue pionero en la creación de un sonido desconocido que reflejó la libertad y la innovación dentro de la música electrónica.
Pero más allá de sus éxitos profesionales, su legado está marcado por su inquebrantable amor por la música y su dedicación para transmitirla a las nuevas generaciones. Desde sus primeros años en los clubes de Barcelona hasta sus producciones con artistas internacionales, Castells construyó un lugar en la historia de la música que perdurará para siempre.
También víctima inesperada e injusta de algunos de los hechos más turbios en la música dance patria, Josep María Castells estuvo a la vanguardia de ese cambio: Con su estilo único y una visión vanguardista, hizo bailar a miles de personas mientras les mostraba el auténtico futuro de la música…
El impacto de un maestro de la música electrónica
Más que un DJ, eminentemente de estudio (sí, entonces existía esa figura), Josep María Castells será siempre recordado como un referente de una época dorada para la música electrónica en España.
Durante los años 80 y 90, la escena electrónica vivió una revolución gracias a él y a otros grandes de la industria, quienes apostaron por la simbiosis entre géneros, los nuevos sonidos, y la prospección en técnicas creativas de mezcla.
El fenómeno de los megamixes es hoy recordado como una variante dance de gran impacto comercial pero con una menor contribución al impulso de la música electrónica. Pero siendo totalmente justos, hay que poner en valor su contribución como fenómeno de masas y el impacto sobre las mentes de quienes lo disfrutaron. Definitivamente, Castells y sus colaboradores y amigos fueron culpables de que muchos decidiésemos emular sus peripecias y extender aquel sonido.
El legado de Josep María Castells trasciende a su despedida
Aunque Josep María Castells ya no estará físicamente en las pistas, su legado permanecerá vivo. Las miles de horas de música que compartió con el mundo continúan siendo una referencia para comprender la música electrónica moderna.
Y sin ninguna duda, su nombre permanecerá grabado para siempre en la memoria colectiva de aquellos que vivieron el auge de la música electrónica en España. Los clubes, festivales y radios que marcaron su carrera son ahora el lugar donde seguiremos homenajeando su influencia.
Una vez más, a través de la música, la figura de Castells seguirá siendo un faro para aquellos que, como él, creyeron en el poder transformador de los sonidos.
Gracias, Josep María, por cada beat, cada momento único que nos ofreciste, cada repeat con recortes de cinta, por cada compás bien «empalmado» y acompasado… Tu legado es eterno