Aún así, todo parece indicar que la llegada potencial de Behringer DS-80 es aún muy lejana…
Siempre hemos visto la futura culminación de la trama analógica de Behringer en los anhelados clones de Jupiter-8, Prophet-5, y por supuesto, Yamaha CS-80. Pero la obtención de copias funcionales de tan alabados sintetizadores polifónicos clásicos, no es algo que consigas de la noche a la mañana; con su trabajo en progreso, Behringer acaba de ofrecer información fresca sobre la magnitud de su propósito, dándonos actualizaciones de lo duro que está resultando el progreso sobre su prototipo Behringer DS-80.
Un trabajo de ingeniería inversa en realidad, sin documentación o disponibilidad de muchos de los componentes originales, es el que está llevando de cabeza al gurú de la electrónica analógica John Price en Manchester (Reino Unido), en su afán por conseguir una copia funcional del analógico de máximo grado que enamoró a gente de la talla de Vangelis (Carros De Fuego, Blade Runner).
Paso a paso, las ocho voces van cobrando forma
Lo más nuevo en este frente, sin embargo, tiene que ver con lo que la marca llama «funcionalidades críticas», refiriéndose al Filtro Controlado por Tensión (VCF), y los generadores de envolventes: «Hoy celebramos un gran éxito ya que todas las funcionalidades críticas, ahora funcionan al cien por cien y de una forma idéntica [a Yamaha CS-80]», asegura Behringer, aunque obviamente no menciona a la marca original, pero sí el modelo clásico.
Así las cosas, y con 50 años de historia dorada a sus espaldas, CS-80 podría tener en algún momento una reencarnación en la forma de Behringer DS-80, ya que al menos sus placas de voces toman forma y resultados poco a poco –al menos nos referimos a resultados como informe, porque en cuanto a sonidos, creemos que tocará esperar aún mucho tiempo ante oportunidades de afinar el oído.
Este trabajo particular ha tomado ya a Price cerca de un año, dedicado a medidas minuciosas de cada prestación en la placa original de voz de CS-80, y a su réplica funcional mediante componentes actuales que aseguren una posibilidad de fabricación. «CS-80 emplea circuitería muy inusual en sus VCO, VCF y modelador de ondas, y eso confiere al sintetizador su sonido único e increíblemente hermoso», comenta un portavoz de la marca de Uli al tiempo de justificar sus acciones de recreación frente al celebrado instrumento de tiempos pasados.
¿Qué será lo siguiente en el desarrollo de Behringer DS-80?
Al parecer, lo que ahora espera en el dique seco de Behringer DS-80 (aunque en progreso) es una complexión del VCO y el modelador de ondas, seguido de la construcción de su propia placa de voz para pruebas y comparaciones finales.
La imagen oficial del desarrollo que está difundiendo Behringer, nos enseña una etapa en los procesos de medición sobre el material original: Las placas amarillas protoboard con perillas de ajuste y un circuito inicial de réplica, dejan ver además una de las placas originales de voz de Yamaha DS-80 (en color marrón oscuro). El osciloscopio del laboratorio presenta sinusoides de uno u otro sistema, ya que el recorrido de los cables sobre la mesa no nos deja precisar la conexión actual de las sondas. Sí nos atrevemos a vaticinar que esas ondas podrían ser de la placa en progreso de Behringer DS-80, porque al parecer es la única placa alimentada al tiempo de la toma de esa imagen (los cables azul, negro y rojo al centro).
Yamaha CS-80, el sintetizador polifónico colosal
Tiempos intensos: Los avances de Behringer DS-80 seguirán llegando
Lo que sí tenemos muy presente es el inmenso nivel de reputación y experiencia de quien está liderando este trabajo electrónico: Tras sus colaboraciones con Rupert Neve y trabajos de muy largo recorrido para compañías como Amek y Midas, John Price es el depositario de las esperanzas de Behringer para culminar con un instrumento final revolucionario basado en un icono incombustible. «Es uno de los mejores ingenieros analógicos del mundo y si alguien puede crear Behringer DS-80, ese es John», asegura la marca.
Los planes de la marca popular, como ya sabíamos, siguen siendo «construir un CS-80 cien por cien auténtico», y no sólo eso, sino que poniéndole una etiqueta asequible que pueda ser atractiva para una masa de usuarios, como ya han comentado y argumentado en los últimos tiempos. Pero a pesar de la agitación y el hype que las nuevas informaciones pudieran generar, no hemos de olvidar que asistimos ahora a lo que parecen ser todavía trabajos muy iniciales de un desarrollo; y todo ello sin olvidar que Behringer incluso ya movió hace tiempo las imágenes ideales del instrumento, lo cual es auténtico humo al viento.
Seguiremos informando de este largo proceso con Behringer DS-80, que sin duda nos dará para muchas más noticias y comentarios en el frente más entusiasta.