Amplía la imagen estéreo de tus pistas, evita un sonido aburrido y apagado…
El concepto ‘amplitud’ en el contexto del audio grabado, ha recorrido un largo camino desde que Thomas Edison asombrara a un desprevenido público con la presentación de su fonógrafo.
Desde entonces, hemos pasado de la ajustada ubicuidad de los sistemas monofónicos a la amplia flexibilidad del estéreo. Y hoy los ingenieros de mezcla y productores disponemos de la opción artificial de ubicar elementos sonoros entre el espacio de los canales izquierdo y derecho captados por los oídos de cada oyente, lo que llamamos la imagen estéreo.
La carrera a día de hoy por la guerra del volumen y el desenfreno de los sonidos más épicos que llenan estadios y festivales, se ha convertido en una caza frenética. Se intenta lograr el mayor impacto sonoro buscando a su vez mejorar la imagen estéreo en la música.
Que conste que no somos muy partidarios de que en una producción todo tiene que sonar lo más fuerte y amplio posible. Si algo tiene que sonar alto o con una mayor imagen estéreo, se debería tener una buena razón para hacerlo.
Sin embargo, si hablamos de un contexto mucho más sutil, y posiblemente con buenos argumentos, la imagen estéreo es algo prácticamente esencial o que deberías tener muy en cuenta en tu música.
Hablamos desde espaciar los colchones o pads con el fin de lograr una atmósfera mucho más profunda, a conseguir unas voces sobrenaturales a través de originales efectos, por ejemplo. El trabajo con la imagen estéreo puede ser una herramienta muy poderosa en el estudio.
Para lograrlo, te presentamos cinco estupendos trucos que te permitirán ampliar la imagen estéreo de tus pistas… ¡Vamos allá!
1. Dobla tus pistas para ampliar tu imagen estéreo
Esta antigua técnica proviene de los fundamentos de la grabación en estudio. Y es típicamente aplicada sobre pistas de voz o guitarra para darles más peso y grosor en el conjunto de toda la mezcla.
Un sencillo y clásico ejemplo es el de doblar la pista vocal en la sección del estribillo. La segunda toma se graba y mezcla con la original, aunque para reforzar el efecto, ambas mantienen un panorama distinto al objeto de crear una imagen estéreo más amplia. Aparte de acentuar el efecto, el resultado obtenido es algo que jamás podría lograrse con una grabación en mono.
Para doblar una pista de instrumento en tu mezcla, tan sólo graba una segunda versión e intenta panoramizar cada una de las partes totalmente a izquierda y derecha, de forma respectiva. Esto creará una sensación de total amplitud estéreo, algo que funciona muy bien sobre guitarras, pero que tal vez desoriente un poco al aplicarlo sobre voces principales.
Como siempre, ¡la experimentación aquí es la clave!
Para voces, podrías intentar tener una pista con el panorama centrado, mientras que añades dos pistas adicionales de la misma parte, aunque cada una panoramizada a izquierda y derecha respectivamente, así como mezcladas con un volumen menor en conjunto. Así obtendrás unas voces principales con una fuerte presencia y con la imagen estéreo que tus estribillos necesitan.
2. Utiliza efectos: chorus, phaser y flanger
Cuando lidiamos con sintetizadores o loops, hay que tener cuidado con los problemas de fase. Los sintetizadores son diseñados, presuntamente, para obtener siempre el mismo resultado cada vez que utilizamos un mismo preset. Por ello debes evitar que siempre que dobles una pista de este instrumento, terminen por anularse o perder volumen por culpa de la mezcla de dos formas de onda similares.
Para mitigar este indeseable efecto, dale a tu segunda versión del sintetizador otro tono, cambia el numero de voces, o bien ajusta algunos de sus parámetros de forma sutil para que el cambio no sea muy radical –cambia el tipo de onda de los osciladores o los efectos que utiliza, por ejemplo.
Las dos partes deben ser lo suficientemente diferentes para que no entren en fase y evitar resultados sonoros indeseables, cuando lo que de verdad queremos es ganar amplitud en la imagen estéreo. Si aún así al reproducirse obtienes malos resultados, deberás seguir modificando parámetros hasta que ambos encajen bien.
Lo mismo debes aplicar sobre loops, ya que es posible que no tengas una versión diferente de la misma toma. Para ello, aplica efectos a una copia del original –aquellos que afectan a la fase en particular, son de gran ayuda en este caso. Los phasers, chorus o flangers e incluso retocar el tono del loop, son posibles soluciones. ¡Incluso cambiar unas pocas centésimas del tono original es otro truco a tener en cuenta!
3. Utiliza efectos: delay, reverb y modulación del panorama
A veces, tan sólo con atraer la atención del oyente hacia el espacio estéreo de tu tema puede ser suficiente para sugerir esa sensación de amplitud. Lo primero que nos viene a la mente, por supuesto, es la reverb. Su objetivo principal es crear una sensación artificial de espacio 3D en la música.
Un uso típico de la reverb es configurarla como efecto principal en un bus y enviar diferentes cantidades de tus pistas hacia ese bus, de modo que cada una suene como si estuviera situada en distintos lugares. Envía más señal al procesamiento de reverb para que la fuente parezca estar más profunda u oculta en la mezcla. Con menos nivel de envío, obtendrás una sensación de que esa pista está más cercana al centro de tu escenario virtual.
Por supuesto, puedes ser tan creativo como quieras con la reverberación. Prueba a panoramizar totalmente a izquierda o derecha una reverb convolutiva cargando un impulso muy corto. Ahora envíale una pista panoramizada al lado opuesto. Lograrás un efecto parecido a un delay slap-back, pero con la sensación añadida de un espacio físico.
Esto nos lleva al hecho de que, a veces, un simple efecto delay puede lograr algo similar, con unos sutiles retoques y dándole ciertos matices. Coloca un retardo en el bus de envío, panoramízalo a la derecha, y envía -10dB de una guitarra –por ejemplo, panoramizada toda a la izquierda. ¡Tendrás una imagen estéreo ampliada al instante!
Un efecto auto-pan o algo que module el panorama de tu pista es otra herramienta muy útil para nuestro propósito. Mientras que puede llegar a ser un efecto muy dramático en comparación con los anteriores, de nuevo con tan sólo atraer la atención del oyente al campo estéreo de tu música puede ser suficiente. Un movimiento de izquierda-derecha-izquierda del panorama puede obrar maravillas y mostrar al oyente un nuevo horizonte sonoro.
El clásico sonido de los pianos Rhodes o Wurlitzer es un gran ejemplo de esta técnica. Normalmente, una simple señal mono, con ese reconocido efecto auto-pan moviéndose rápidamente, logra darle ese enorme sonido tan característico que ha dejado huella.
4. Capas de voces para mejorar la imagen estéreo
Una de las funcionalidades potentes y más apreciadas de los sintetizadores es su capacidad para la generación de capas de voces. Múltiples copias de una forma de onda dada se mezclan entre sí con una ligera desafinación entre ellas, para crear un delicioso y grueso sonido arrollador. Se trata del ingrediente secreto que hace que los sintetizadores analógicos de los 80 obtengan esos enormes e hipnóticos colchones.
Si estas utilizando un sintetizador software y tiene este efecto, no dudes en experimentar. Otra forma de aproximarte a este efecto, es utilizar un plugin decente de chorus que consiga lo mismo.
Incluso puedes conjuntar diferentes efectos de chorus. Aplica un efecto sobre la pista que desees, pero con una mezcla muy sutil con el sonido original; después envía esta pista a un bus con otro efecto de chorus, pero con ajustes diferentes.
Con cuidado en los ajustes de mezcla y niveles, e incluso jugando con el panorama entre la señal original y el bus de efectos, lograrás un agradable y amplio sonido que no ahogue a tu CPU.
5. Utiliza efectos: Imagen estéreo
Nuestro truco final para mejorar la imagen estéreo es probablemente el más obvio, utiliza un plugin de ensanchamiento estéreo. De hecho su evolución y mejora han crecido con los años, y están disponibles diferentes versiones y marcas. E incluso los hay en forma de excelentes plugins gratis –se nos ocurre la mención de iZotope Ozone Imager, por ejemplo, que cubrimos con todo detalle aquí. Así que necesitaban ser incluidos con justicia entre estos trucos.
Los plugins de ensanchamiento estéreo te permiten cambiar la percepción de la amplitud estéreo de tus pistas por su frecuencia, dándote como resultado un alto grado de control sobre la sensación espacial de tu música.
Esto resulta especialmente útil en la salida máster, donde puedes dar un extra de amplitud a los agudos de la mezcla, mientras mantienes bajo control todo el espectro de graves.
También pueden ser muy prácticos sobre partes concretas de la mezcla. Ese colchón o pad que no suena lo suficientemente brillante y grueso puede destacar y resucitar gracias a un plugin de imagen estéreo, dando un empujoncito a sus frecuencias adecuadas.
Esta clase de procesadores de ensanchamiento estéreo tampoco es la panacea, pero sí es cierto que pueden ayudarte mucho a imprimir esa profundidad y amplitud de forma sutil a tus mezclas.
Listo para llevar
La mayoría de estos trucos de imagen estéreo, puede utilizarse en distintos grados, dando lugar a efectos muy extremos o muy sutiles. Pero el consejo final es empezar siendo muy cautelosos, para ir añadiendo más complejidad según el resultado se adapte a nuestro estilo musical.
Lo importante es no estancarse en lo que el propio sonido original nos dé al aplicarle amplitud estéreo. Ya sea un colchón de sintetizador estéreo, un loop, o una grabación de diferentes micrófonos, prueba siempre a darle una vuelta de tuerca más, y expande tus horizontes creativos.
Este contenido se publica mediante licencia expresa del autor. El texto original en inglés, «5 Tips To Widen Your Sound«, está disponible en el blog Magazine de Mode Audio. Adaptación al español y aportaciones de Voynix.
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