Ahora que está a punto de llegar agosto y el mundo está planchado en las finas arenas de nuestro país, quiero hacerle un homenaje a las noches de verano, a las fiestas en los clubs de isla blanca, a los calores de las tardes eternas y a la música (comercial, sí, blablabla) que nos alegra la vida y nos hace saltar como poses@s…