Unos días antes de la feria Winter NAMM 2013, se difundieron imágenes de un nuevo sinte Korg de alta gama. Con un diseño que combinaría múltiples osciladores y tipos de filtros modelados, cumpliría un buen papel dentro de un estudio y, fuera, sobre los escenarios. Los rumores fueron creciendo en las redes sociales y, sí, el lanzamiento de la máquina fue confirmado: ahora tenemos en nuestras manos a KingKORG, un sinte de nombre curioso que probaremos a fondo.
Cuando analizamos el sinte Moog Voyager XL, no hace mucho tiempo, decíamos que es el tipo de sinte que cualquiera diseñaría si sólo tuviese fotos de productos Moog, cortándolas y pegándolas con Photoshop. Avanzamos hasta el presente, en pleno 2013, y de alguna forma, esos recuerdos también afloran en el sinte que analizamos. Pero veamos todo lo que hay más allá de la equivalencia por denominación con el famoso simio gigantesco de Hollywood que escalaba el rascacielos Empire State Building…
¿Es un mono? No, ¡desborda energía polifónica!
Descrito a la sazón como un «sintetizador para actuaciones», eso nos sugiere que el atractivo de KingKORG se basa en traspasar las barreras del estudio, saltando a los escenarios. Claro está, el entorno donde lo uses dependerá por completo de cómo suene este producto.
Es una máquina de tres osciladores basados en cuatro motores: ‘Analog’, ‘DWGS’, ‘PCM’, o ‘Mic In’. Su ajuste en cada ‘Oscillator’ es una pura delicia…
Por fortuna, en Korg saben lo que se hacen al respecto, y su último «juguete» emplea un nuevo motor XMT (Xpanded Modelling Technology, o Tecnología eXpandida de Modelado), que recrea fuentes sonoras con un amplio potencial tonal: desde precisos modelos basados en muestras, a ricos sonidos híbridos analógicos.
KingKORG es una máquina de tres osciladores que se basan en cuatro motores diferentes: ‘Analog’, ‘DWGS’, ‘PCM’, o ‘Mic In’. El ajuste de dichos motores en cada ‘Oscillator’ es una pura delicia. Para ello, haces clic en el oscilador que estés ajustando y, o bien recorres de forma secuencial las formas de onda, o pulsas el knob ‘Type’ para moverte entre ellas. Mientras, la ventana ‘Oscillator’ te da la última información acerca de tus elecciones. Todo esto lo «duplicas» si configuras el teclado en capas (‘Layer’) o lo divides (‘Split’), y puedes reproducir de forma simultánea hasta dos timbres (‘Timbres’).
La parte superior izquierda del panel viene repleta de efectos y, en este aspecto, KingKORG no te defraudará en absoluto. Los efectos se dividen en diferentes módulos y dispones de las secciones ‘Pre FX’, ‘Mod FX’, y ‘Rev/ Delay’ para los apartados ‘Timbre A’ y ‘Timbre B’, si estás usando los programas ‘Layered/ Split’. La sección ‘Pre FX’ te ofrece los ajustes ‘Amp’ y ‘Distortion’, el apartado ‘Mod FX’ tiene efectos de modulación que incluyen ‘Flanger’, ‘Chorus’, y ‘Tremolo’, y el motor ‘Rev/ Delay’ ofrece una gama de tipos de retardo o los clásicos algoritmos ‘Plate’, ‘Room’, y ‘Hall Reverb’ para añadir efectos de reverberación.
La guinda de este pastel procesado la pone el circuito de distorsión ‘Tube Driver’, por el que pasan todos los sonidos. Esta opción incluye un botón ‘On’, un dial ‘Drive’ y, si te sientes malvado, el botón ‘Boost’: ¡agárrate al asiento si activas dicha «parte malvada» en la personalidad de esta criatura simiesca!La sección del filtro adopta un enfoque similar y emplea varios ‘Types’ modelados. Dispones de 18, que incluyen réplicas de MS-20 y opciones ‘Acid’ que representan veladas referencias al filtro de TB-303 –también verás filtros SEM, Minimoog, y Prophet 5. Dispones de los diales ‘Filter Cutoff’, ‘Resonance’, y ‘EG Amount’ por lo que configuras la mayoría de ajustes de filtros al vuelo.
En el lado derecho, tienes los controles ‘Amp’, que incluyen un dial ‘Level’, además de botones ‘Unison’ y ‘Vocoder’. Este último utiliza una entrada XLR para micro en el panel posterior y el dial ‘Level’ para micro del extremo izquierdo con el fin de generar vocoding de 16 bandas. Los programas del 196 al 200 crean ‘Programs’ instantáneos para el ‘Vocoder’ y nos parecen muy divertidos.
Hay que recalcar que, si bien KingKORG proporciona un total de 300 ‘Programs’, sólo dispones de 100 para tu uso personal, pues los programas del 1 al 200 utilizan sonidos de fábrica –no parece un reparto muy equilibrado que digamos. Por lo demás, el lado derecho del panel se completa con dos LFOs y envolventes ADSR con acceso inmediato a las asignaciones ‘Filter/ Pitch’ y ‘Filter/ Amp’.
La bestia se suma a la fiesta
El año 2013 señala el quincuagésimo aniversario de Korg en la industria y, en cierto modo, KingKORG es el instrumento ideal para celebrar tan señalada ocasión. Este sintetizador recoge influencias de una larga lista de productos clásicos de la compañía, que incluyen máquinas como las unidades MS-20 y MS2000, y en su modelado físico quedan reflejados aspectos de productos pioneros, como Z1 y Prophecy.
Lo más agradable de todo es cómo Korg abordó el diseño al construir KingKORG. Accedes a la mayoría de funciones que desees gracias a una serie de ajustes determinantes que ves en cada sección del sinte, claramente etiquetados y muy al alcance de tus dedos. Claro está, la máquina contiene una amplísima lista de parámetros que seleccionas desde innumerables páginas (‘Pages’). Algunos parámetros –que incluyen los patrones ‘Arpeggiation’ para diseñar arpegios– son de agradecer, aunque no sean tan intuitivos como el resto en la distribución de este sinte. Si tenemos en cuenta lo bien que suena el ‘Arpeggiator’, nos habría gustado editarlo de forma directa desde el panel frontal, máxime cuando la pantalla principal ofrece suficiente espacio libre para ello. Pero esto es algo que quizá veamos en alguna actualización, si es posible.
Aunque su diseño es el de un instrumento híbrido –en términos de sus credenciales para estudio/ escenario y a través de la naturaleza de sus motores–, el sonido de KingKORG ofrece una satisfactoria uniformidad y, en ese sentido, le dota de su propia huella sonora, la cual por otro lado nos encanta.
Nuestra primera impresión fue que su precio era ligeramente elevado, pero resulta comprensible que la adquisición de un KingKORG es una ganga en base a lo que te supondría la compra de todo el hardware equivalente desde el que toma sus sonidos; de hecho, esas adquisiciones nunca serían una alternativa viable para la mayoría de los músicos mortales.
Dicho eso, si buscas un sinte de modelado analógico que ofrezca un panel bien diseñado, con sonidos rompedores y con una estupenda y variada gama de tonos que te permita crear otros personalizados, sólo has de enfrentarte a este «simio» para ser tú mismo quien juzgue su enorme potencial sonoro.
Sitio web:
http://www.korg.es/sintetizadores/746-kingkorg-el-rey-de-los-sintes-de-modelado-analogico
Precio: 1.199€