Destacados en el catálogo, ofrecen un gran rendimiento para entornos de mezcla y mastering
Monkey Banana Silverback es un monitor activo de campo medio que combina un diseño coaxial con un recinto hexagonal optimizado para minimizar vibraciones. Además, su amplificador digital está controlado vía DSP.
Dado que es un monitor de rango completo, no obliga a emplear subwoofer de apoyo: permite disfrutar de las frecuencias más graves y ofrece un sonido directo y preciso, merced a su espectacular diseño coaxial. La consecuencia directa de esto es que los Monkey Banana Silverback admiten ubicaciones en vertical u horizontal.
El cono de su woofer de 15” escupe hasta 300W de potencia, junto a dos tweeters de 3”, dotados de un diafragma en titanio que soportan 100W por motor. Esta dotación los hace capaces de «ofrecer el mejor rendimiento en combinación con sus respectivos amplificadores, que entregan una potencia de 500W», destaca Pedro Pina desde BitBeat, distribuidora oficial de la marca en España.
Los sistemas de amplificación digital Clase D «de última generación», integran un procesador DSP. Éste optimiza el rendimiento del equipo y ofrece presets de ajuste para adecuar los monitores a las circunstancias particulares de uso. Los atractivos Monkey Banana Silverback se prestan a tareas de mezcla y mastering sobre entornos exigentes -pero ¿qué impide otros usos, incluso en cabinas DJ o estudios caseros? Un lujo en cualquier caso, disponible en colores negro y verde, por 1.890€.