Se dice que es posible optimizar la acústica y el sonido de un estudio utilizando un ecualizador gráfico y un analizador espectral… ¿Es cierto? ¿Qué es exactamente un analizador de espectros? ¿Necesitas paneles acústicos para tus paredes?
Al abordar esta temática, parece que acabamos de abrir una lata llena de gusanos. Una respuesta simple a estas preguntas de la introducción es un «sí». Y es que dado un «buen entorno acústico», podríamos situar un micrófono de referencia en la posición ideal de escucha (punto dulce o sweet spot), alimentar el sistema con ruido, y ecualizar cualquier cosa que salga de los altavoces hasta que su respuesta sea plana.
Un analizador espectral nos indica el nivel del sonido a lo largo de una banda de frecuencias (en audio se referiría a la banda pasante de 20Hz a 20kHz). Y en este caso, la teoría nos dice que si ponemos una señal conocida a la entrada, la diferencia entre ella y lo que salga del analizador será la coloración introducida por el sistema. En dicha situación, nos referimos a un sistema que contemple el camino que recorre la señal, los altavoces y la propia sala.
La ecualización puede darnos un «apaño efectivo» en circunstancias extremas, pero si antes de eso tratas tu sala acústicamente, conseguirás resultados mucho mejores…
Las pruebas acústicas en el mundo real
Por desgracia, nada resulta ser «ideal», así que la EQ sólo es una parte ínfima de la solución. Lo único que nos dice un análisis espectral son los niveles de energía contenidos en la banda de frecuencias, pero no dice nada sobre la composición del sonido.
En la situación que planteábamos (que suele ser la más frecuente en la preparación de cualquier estudio), se debería empezar por realizar un acondicionamiento acústico de la sala. Cualquiera puede hacerlo por la vía seria y contratar a un ingeniero en acústica para que diseñe el mejor tratamiento para su sala; o quien se conforme con ello puede optar por una vía «de andar por casa» siguiendo reglas básicas –siempre que no pretenda conseguir un entorno de acústica eficiente, el cual cuesta cada céntimo que se paga.
Al instalar paneles acústicos de buena calidad en las paredes, conseguirás absorber una gran cantidad de reflexiones que en la práctica ocasionan ciertas complicaciones acústicas. Para abordar este tema necesitamos mucho más espacio del provisto en este post, así que te recomendamos que amplíes tu información con las lecturas enlazadas que te damos más abajo. Lo cierto es que la ecualización puede ser un «apaño efectivo» en circunstancias extremas, pero si antes de eso tratas tu sala acústicamente, conseguirás unos resultados mucho mejores.