Convocatoria abierta para nuevo logotipo de analogia.pl… «Si decidimos optar por tu diseño, te daremos el sinte Roland SH-101 que aparece en la imagen», dicen. Así de simple, sin condiciones
La convocatoria ya está abierta y podrás hacerte con esta maravilla 101, recién restaurada y puesta a punto, junto a un nuevo juego de deslizadores y potenciómetros, incluidos también en la caja.
Su historia es de lo más sencilla: Nuestros amigos de Analogia.pl llevan varios meses buscando en vano un logotipo que les guste. «Necesitamos sobre todo un símbolo minimalista, es decir, una marca/ icono, y un logotipo que combine».
Si eres capaz de crear una idea inspiradora para ellos, podrías conectarte directamente con el maravilloso pasado de los monosintetizadores Roland.
«I’m enclosing a few inspirations from the ‘golden age’ of Polish logo design –but at this stage, we will gladly consider anything original you may come up with. You are more than welcome to send your ideas in a very unpolished from, even pencil on paper or ink on napkin are fine…» –Maciek Polak, analogia.pl
«Adjunto algunas inspiraciones de la ‘época dorada’ del diseño polaco de logotipos; pero en esta etapa, con gusto consideraremos cualquier idea original que se te ocurra. Puedes enviarnos tus ideas sin pulir, incluso con lápiz sobre papel o tinta sobre una servilleta…» – Maciek Polak, analogia.pl
Echa un vistazo a la convocatoria en su perfil oficial de Instagram (link abajo). Y envía tus ideas de diseño de logotipo a info @ analogia.pl (es decir, sin espacios).
+INFO
Paraíso de sintes vintage: Analogia.pl
| Instagram oficial
Roland SH-101, uno de los monosintes más icónicos de la historia
Lanzado en 1982, Roland SH-101 fue diseñado para ser un sintetizador asequible y portátil. Este instrumento analógico ofrecía una estructura simplificada aunque poderosa, con un oscilador capaz de generar formas de onda cuadrada, en diente de sierra y subosciladores que arrojan bajos contundentes y solistas vibrantes.
Su facilidad de programación y su distintivo sonido lo convirtieron en una herramienta clave para músicos vanguardistas de la época –aunque en su momento, no recibió tanta atención como otros sintetizadores más complejos.
Sin embargo, SH-101 fue redescubierto en los años 90 por productores de house y techno, consolidándose como un pilar fundamental en la música electrónica.
Aún rompedor en el estudio, o llamativo en directo como keytar
También destacó por su diseño versátil y llamativo: Roland SH-101 estuvo disponible en colores gris, azul y rojo, con la posibilidad de usarlo como un teclado de bandolera (keytar), gracias a su portabilidad y alimentación por pilas.
Aunque su tiempo en el mercado fue limitado, su legado ha perdurado a través de generaciones. Hoy día, el 101 sigue siendo celebrado tanto en su formato original como en versiones modernas; es el caso de SH-01A o las expansiones digitales en plataformas digitales masivas como Roland Cloud.
Estas reinterpretaciones han mantenido viva la esencia de SH-101, al tiempo que añaden mejoras significativas, como polifonía, efectos modernos y una mayor conectividad. Todo ello asegura que este legendario sintetizador siga siendo relevante para músicos contemporáneos. Pero claro, no hay nada como disponer de «la auténtica cosa real», un tesoro del tiempo que aún suena fabuloso.