Rompiendo los arquetipos de señales, acústica y altavoces, SubPac S1 nos propone una nueva forma de experimentar los subgraves de la música: usando nuestro propio cuerpo. Demonios, esto es tan innovador que nos moríamos por experimentarlo en persona…
Vivimos en los tiempos de los sentidos hápticos, que modelan desde los dispositivos personales -dotados con pantallas multitáctiles- hasta videojuegos y otros sistemas que procuran nuevas sensaciones más allá del hábito en cuanto a la vista y el oído. Viéndonos inmersos entre tanta innovación táctil (el campo sensorial abarcado por el Háptica), el mundo del audio tenía que verse remodelado en algún momento, y parece que SubPac S1 llega justo para eso.
Lo que hoy tenemos entre manos es un transductor táctil de audio, capaz de comunicar gamas bajas de frecuencias a nuestro cuerpo, con una consecuente dimensión innovadora en cuanto a monitorización y experiencia musical. Las palabras del investigador J Gibson (uno de los autores clásicos en cuanto a las investigaciones psicológicas sobre el tacto) son muy gráficas para el caso de SubPac S1: en 1966 definió el sistema háptico como «la percepción que obtiene el individuo del mundo adyacente a su cuerpo mediante el empleo de su propio cuerpo».
SubPac S1: más que escucharlos, los subgraves se sienten
Tan acostumbrados como estamos a evoluciones de los dispositivos musicales, con mejoras constantes en ergonomía y funcionalidades, sonidos más impactantes y demás -pero todo ello dentro de lo predecible-, reconocemos que la llegada de SubPac S1 nos ha dejado paralizados. No conocíamos nada parecido a esto, ni remotamente: una almohadilla textil que pones en el respaldo de tu butaca, en contacto con tu espalda, para sentir literalmente los subgraves de la música que estés escuchando.
Propuesto a principios de 2013 como un proyecto de Kickstarter.com -ese hervidero tecnológico en la Red a la sombra del crowdfunding– SubPac acabó siendo desarrollado por la compañía americana Studiofeed tras reunir un fondo de 100.000 dólares.
Lo que hoy tenemos entre manos es un transductor táctil de audio, capaz de comunicar gamas bajas de frecuencias a nuestro cuerpo, con una consecuente dimensión innovadora en cuanto a monitorización y experiencia musical…
Para su operación, SubPac S1 emplea una unidad intermedia que permite conectar una entrada de audio vía minijack de 3,5 pulgadas. Alimentada desde una batería interna recargable o con el adaptador suministrado de alimentación, dicha unidad dispone de un regulador de intensidad «háptica» y dos LEDs indicadores para actividad y carga.
Es posible conectar cualquier fuente, desde un móvil o un reproductor MP3 a incluso la salida de auriculares de un ordenador o una mesa, un interface de audio o el envío de monitor desde un mezclador. La unidad provee una salida para conectar unos auriculares.
Para una primera toma de contacto, es recomendable fijar ese regulador de intensidad al mínimo, para ir aumentando la sensación según tus preferencias. El rango de regulación va desde una vibración escasamente perceptible, hasta un terremoto de sensaciones difícil de soportar por un tiempo prolongado -es en ese extremo cuando SubPac S1 emite un ruido en funcionamiento que puede ser molesto para alguien que tengas cerca.
Una idea con aplicaciones de amplia cobertura
Expuestos ya el concepto y su funcionamiento, toca imaginarse las aplicaciones. Y para responderlo, nada mejor que preguntarse… ¿a quién no le gustan los subgraves? Desde amantes de la música en toda su riqueza de frecuencias (en especial de estilos dance y Bass Music) a friquis de los videojuegos, amantes del Cine, y por supuesto, productores musicales y DJs, todos ellos -entre quienes nos incluimos- pueden usar SubPac S1 y beneficiarse de su innovación.
Su respuesta en frecuencia abarca desde 20 a 130Hz, y no hablamos de un simple convertidor de graves a vibraciones variables en plan «respaldo de masajes». En lugar de eso, SubPac nos proporcionó una sensación tridimensional de esas frecuencias, empleando nuestro cuerpo, y comunicándonos la fuerza del low-end como si estuvieses frente a un lineal de subwoofers en un concierto -pero sin olvidarnos de que seguíamos sentados frente a nuestro ordenador.
Esta suerte de subwoofer silencioso te brinda una detección precisa entre subgraves, graves y graves-medios, y es especialmente práctico para estudios domésticos que no pueden permitirse un subwoofer en condiciones. SubPac también es un aliado de la noche, cuando la monitorización de subgraves no es algo recomendable, a no ser que pretendas acabar apoyando tu cabeza sobre esta almohadilla en la comisaría tras el horror de tus vecinos. Esta comodidad silenciosa no sólo te permite monitorizar subgraves en condiciones antes imposibles, sino que incluso se presta a ser transportada -ideal como solución portátil para DJs y productores en movimiento.
Nueva dimensión para monitorizar bajas frecuencias
Estuvimos probando SubPac S1 con pasajes musicales diversos, y nos proporcionó una representación fidedigna, completa y dinámica de las bajas frecuencias, pero sobre todo, una experiencia apasionante y desconocida en un plano netamente físico y fisiológico. El regulador de intensidad «háptica» fue de una gran ayuda para compensar aquellas fuentes carentes de una producción cuidadosa en subgraves.
Un detalle importante a destacar es que la unidad intermedia no colorea el sonido, sino que filtra un rango del mismo, de una forma similar a como un subwoofer opera con los subgraves. Este es, precisamente, el factor que permite emplear SubPac S1 como una herramienta seria de producción musical.
De hecho, es una herramienta muy valiosa y precisa para los trabajos de mezcla, permitiéndote percepciones táctiles de las ubicaciones reales de los sonidos en un rango tan apretado como es el de los graves. Y por descontado, proporciona una enorme disfrute cuando sólo quieres escuchar tu música predilecta por puro placer, en toda su banda pasante, y sin molestar a nadie.
Poniendo en valor los 385 euros del precio de SubPac, su propuesta nos parece de lo más interesante: no en vano proporciona todas las posibilidades de monitorización de un subwoofer dedicado, con la dimensión física añadida de su concepto, y sin la necesidad del acondicionamiento acústico que implica el uso de un sub cuando se desea exprimir todo su potencial.
Todo lo que rodea a SubPac S1 evidencia genialidad y valor práctico, y será apasionante comprobar hasta donde la compañía Studiofeed llegará con sus ideas en el futuro.
MÁS INFORMACIÓNPrecio de lista: 385 euros
Sitios web: Información detallada desde StudioFeed (en inglés)
DISPONIBILIDAD Y PRUEBAS DEL PRODUCTOSubPac está disponible en los siguientes distribuidores autorizados, donde también podrás obtener demos personales: