Ayer se hizo pública la demanda interpuesta conjuntamente por WARNER MUSIC SPAIN S.A., UNIVERSAL MUSIC SPAIN S.A., EMI MUSIC SPAIN S.A., SONI BMG MUSIC ENTERTAINMENT S.A. y PROMUSICAE.
Para que te hagas una idea del lastimero punto en el que se encuentran las grandes multinacionales de la industria musical, piden más de 13.000.000 euros por daños y perjuicios contra la empresa MP2P Technologies, alegando «competencia desleal».
Pablo Soto, presidente y fundador de MP2P Technologies comenta al respecto:
«Planeamos defendernos firmemente contra este intento de destruirnos, por parte de las multinacionales discográficas», continúa:
«En lugar de abrazar la tecnología, eligen un camino que en última instancia les llevará a su propio final. El litigio en sí mismo no es un modelo de negocio válido, sin embargo, ha sido su fútil y desesperado objetivo desde el advenimiento del P2P.»
“PROMUSICAE intentó plantear acciones civiles contra usuarios de redes P2P en España, y tras fracasar ante el Tribunal de Justicia de la UE, ha decidido cargar contra una herramienta de comunicación neutral como es la tecnología P2P.” añadió Soto.
Pablo Soto es considerado uno de los pioneros del P2P, junto con otros distinguidos creadores como Justin Frankel (Gnutella) y Shawn Fanning (Napster). Conferenciante frecuente en foros nacionales e internacionales, ocasionalmente sirve como profesor invitado en diversas universidades a nivel nacional. Sus progresivos logros han obtenido reconocimiento en prensa internacional incluyendo CNN, The New York Times, Reuters, AP, USA Today, C/Net, Rolling Stone, CBS News, San Jose Mercury News, entre muchos otros.
Esperemos que la demanda sea desestimada judicialmente porque a todas luces, esto es una cabezonada turca de las buenas.
El caso es que bajo mi personal punto de vista, emprender acciones legales contra todo un planeta, agotará los escasos beneficios que la industria musical pueda aportar.
Deberían buscar otros puntos de vista, e intentar aprovechar lo bueno que el P2P pueda hacer por ellos. Aunque a esos niveles, creo que pocos deben ser los músicos, y muchos los abogados.