Beatsurfing, la app de control MIDI para iPad, te permite crear tus propias superficies de control usando y configurando tantos de sus cuatro ‘Objects’ (‘Lines’, ‘Circles’, ‘Polygons’, y ‘Faders’) como quepan en la pantalla. Los tres primeros envían notas MIDI en varias formas –como ‘stepped’ donde cada toque dispara la siguiente nota en la cadena– y ‘Faders’ transmite datos pitchbend y todo el rango (0-127) de MIDI CCs.
Los círculos y polígonos pueden encadenar hasta 16 y ocho notas de forma respectiva; las líneas y polígonos (estos últimos son conjuntos de líneas) pueden tener notas «secundarias» y disparadas de forma direccional asignadas a golpeteos bidireccionales. Es posible ajustar ‘Behaviours’ entre elementos y hacer que interactúen unos con otros; y colocas múltiples controladores para crear estructuras más complejas de disparo llamadas ‘Swarms’.
Editar un patch de Beatsurfing es fácil e intuitivo y todo se hace dentro de la aplicación sin tener que usar un editor Mac o PC. La conexión a un secuenciador o instrumento MIDI se hace vía WiFi/ conexión física, y puedes disparar y controlar a través de CoreMIDI las aplicaciones compatibles que estés ejecutando en ese mismo iPad –lo pasamos muy bien en concreto con el magnífico Animoog.
A pesar de su nombre, Beatsurfing sobresale en controlar sintes, patches melódicos de sampler, y percusión glitchy. En batería convencional, decrece su valía –tocar beats en una pantalla táctil es divertido unos minutos, pero en términos musicales, los resultados no son tan útiles a menos que tengas algo intencionadamente atemporal en mente. Lo que sí necesita es un secuenciador interno, incluso aún desmereciendo la filosofía de rendimiento en tiempo real de esta aplicación. Aún así, Beatsurfing es un controlador innovador y potente, de un uso muy directo, y capaz de una gran profundidad e inspiración artística.
Nuestra valoración: 8 sobre 10
Formato: iPad. Web: www.beatsurfing.net